Una de las cosas más difíciles de ser mamá Down, no tiene absolutamente nada que ver con el bebé, sino con terceros. Porque sí es difícil salir a la calle, eso no he de negarlo. La gente se queda mirando —miran al bebé y te miran a ti—, como tratando de descubrir lo triste que debe ser tener un bebé Down.
Los hay que miran y se hacen los locos. Los que miran y vuelven a ver para cerciorarse, y luego disimulan. Y los que miran y no te quitan la mirada de encima. Quizás sean los más molestos.
La gente piensa, en serio, que esto de tener un baby Down debe ser el fin del mundo para uno de padre. Y no lo es.
Sin embargo, nada afecta más que esa sensación horrible de sentirse compadecida.
El otro día, donde el cardiólogo, una mujer sentada a mi lado me preguntó si tenía más hijos. Le respondí que una más. —Ah. —Me dijo. —Porque esta le salió enfermita, ¿verdad?
Me le quedé mirando a Mariana que estaba en mis piernas, y le contesté: —¿Enfermita ella? No, si viera qué sanita es. Enfermedad es algo de lo que uno se muere, —le aclaré— ella sólo tiene Down.
La señora no volvió a comentarme nada más que trivialidades del clima y otras cosas, y espero que le haya quedado bien claro el mensaje.
Los hay que miran y se hacen los locos. Los que miran y vuelven a ver para cerciorarse, y luego disimulan. Y los que miran y no te quitan la mirada de encima. Quizás sean los más molestos.
La gente piensa, en serio, que esto de tener un baby Down debe ser el fin del mundo para uno de padre. Y no lo es.
Sin embargo, nada afecta más que esa sensación horrible de sentirse compadecida.
El otro día, donde el cardiólogo, una mujer sentada a mi lado me preguntó si tenía más hijos. Le respondí que una más. —Ah. —Me dijo. —Porque esta le salió enfermita, ¿verdad?
Me le quedé mirando a Mariana que estaba en mis piernas, y le contesté: —¿Enfermita ella? No, si viera qué sanita es. Enfermedad es algo de lo que uno se muere, —le aclaré— ella sólo tiene Down.
La señora no volvió a comentarme nada más que trivialidades del clima y otras cosas, y espero que le haya quedado bien claro el mensaje.
6 comments:
Eso de las miradas es difícil de controlar. A partir de tu experiencia me he sensibilizado mucho más respecto al tema, pero no puedo dejar de volver a ver cuando veo algo diferente en mi entorno, y los niños Down son diferentes. Lo que he podido modificar es mi forma de verlos, de hacerles ver que siendo distintos, no lo son.
Gracias por la enseñanza.
Mi querida Vanessa:
No le prestes atención a la gente. A mi me ha pasado lo mismo. la gente mira y mira y envidia. Siempre te miraran, aunque Mariana no tenga Down. Siempre dirán cosas de nuestros hijos: que están despeinados, que no se parece al papá, que no le pusiste unos zapatos más bonitos, de que lástima que esté enferma y de lo descuidada que fuiste para que se enfermara, que sé yo, tonterías pues.
No te enojes, pero si defiende. Que eso no te perturbe el sueño y que no te limite las salidas a la calle. La gente es la gente.
Besos y cariños.
Hola Aldebarán. Es que ahí está el punto: qué de raro puede tener un bebé Down. Sobre todo tomando en cuenta las estadísticas: son 1 entre 600!! Es decir, son muchos. Existen. No son cosa de otro mundo. Entiendo tu punto, que la gente ve distinto a los distintos... y yo debo haberlo hecho antes, supongo. Pero de que la gente es imprudente, sí lo es.
Vanessa:
Lo que pasa es que durante mucho tiempo los tuvimos a los niños Down encerrados, para que nadie los viera. Hoy es mucho más frecuente verlos en centros comerciales, en los restaurantes y en las áreas de juegos. Igual pasa con las personas que necesitan muletas, sillas de ruedas o que tienen alguna limitación física: se han vuelto visibles porque reclamaron su dignidad como personas.
Por otra parte, tiene razón Krisma en que la gente siempre hablará tonterías. Es como que en lugar de hablar sobre el clima usaran como tema el infante que llevas contigo.
Tú sabes que no intento justificar las acciones que describes en tu post. Al contrario, quiero recalcar que hay actitudes que van cambiando de a poquito.
Un saludo para vos, para tu familia y dos besos para Mariana.
Hola, antes que nada quiero Felicitarte por tu blog, me entere de el por el Periodico y me llamo mucho la atencio por la foto de tu bb tan linda, yo tengo dos bebes y siempre tuve miedo de que algo asi me pasara, pero me doy cuenta con todo lo que he leido en tu blog que no hay diferencia y mas de alguna vez me e encontrado con chic@s Down y son superespeciales pero como tu dices depende mucho de los papas y lo demas no importa, me encanto esta foto porque tengo una de mi hija muy parecida, hasta la sonrisa tan dulce e inocente que tienen todos los niños Sigue adelante y besos para tus princesas
Rosario
PD
Ojala puedas ver la foto de mi beba y veras que tienen la misma sonrisa de inocencia y dulzura
http://i148.photobucket.com/albums/s19/R_alay/000_0601.jpg
Hola Rosario! Está super linda tu gorda! Y de verdad que su sonrisa es muy bonita. Me divirtió mucho ver que tienen los mismos suéters. Y bueno, así es la globalización. Saludos y gracias por tu visita.
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